¿Qué pasaría si uniéramos al primer y al segundo signo del zodiaco? De acuerdo a las matemáticas, uno más dos es igual a tres, el número de la perfección. Sin embargo, en astrología las cuentas no son tan sencillas. Conozcamos a cada uno de sus protagonistas y veamos cuál sería el resultado de una fusión entre ambos.
Cómo es el signo Aries
- Impulsivo
- Irreflexivo
- Temerario
- Pasional
- Irresponsable
- Entusiasta
Aries cuenta con todo el entusiasmo del mundo para emprender nuevos proyectos, pero su gran falla radica en no evaluar si se trata de algo rentable o conveniente. Prefiere vivir y experimentar todo con sus propios sentidos antes que poner a la mente a su servicio. Se arroja a todo aquello que le llama la atención, pero con la misma facilidad y presteza lo abandona sin remordimientos ni pena por las pérdidas de las que fue víctima. El dinero tiene para este signo un valor subjetivo.
Cómo es el signo Tauro
- Reflexivo
- Calculador
- Materialista
- Sensual
- Responsable
- Precavido
Tauro reflexiona muy bien antes de tomar cualquier clase de decisión. No se deja llevar por la ilusión que algo pueda producirle, sino que prefiere pasar todo por el estricto filtro de la razón. Es un maestro es hacer a un lado las emociones para darle la bienvenida a la lógica. Se rige por una estricta responsabilidad y el dinero es la base de su vida. Le da mucha importancia a los asuntos materiales y se vuelca hacia costumbres que maridan con el ahorro en vez de con aquellas que lidian con el despilfarro.
Compatibilidad de Aries y Tauro en el amor
Esta es una pareja que no tiene muchas posibilidades de sobrevivir si es que uno de los dos no cambia de forma sustancial para adaptarse al otro y, como es de esperarse, esto no tiene por qué suceder. El más adaptable de ambos es Aries, pero esto no quiere decir que se deje controlar por el celoso y posesivo Tauro. Aries es un gran seductor, lo que a Tauro pronto pondrá los nervios de punta y los reclamos fluirán como las cataratas del Niágara.
El dinero también se colará en medio de esta pareja y no cesará de generar problemas. Mientras que Aries querrá utilizar hasta el último centavo en nombre de la diversión y de proyectos de negocios de dudoso retorno, Tauro insistirá en ahorrarlo.
Cuando Aries sea el encargado de planificar las vacaciones y termine arrastrando a Tauro a escapar a toda velocidad de los tiburones hawaianos, Tauro se dará cuenta de que ha sido suficiente.
En otras palabras, son el día y la noche. Por lo tanto, a menos que Tauro esté dispuesto a jugarse toda su estabilidad o que Aries reprima toda su energía exploradora, no pasará de ser una atracción pasajera.
